Deja de Validarte Con Los Resultados (Y Empieza a Hacerlo Con Tus Acciones)

Hace un tiempo tenía que subir un vídeo a YouTube como cada semana.

Día de crear contenido y mantener mi compromiso con mi audiencia.

Pero si seguías mi canal, igual te diste cuenta de que ese día no apareció nada nuevo.

No fue por pereza. No fue porque me hiciera el remolón.

Fue porque ese fin de semana decidí cambiar de aires y di por hecho que habría WiFi.

Plot twist: no había (mi yo del futuro, ya te digo, revisó ese dato antes).

Y claro, grabé el vídeo como siempre, edición hecha, todo listo... pero al ir a subirlo, los datos del móvil dijeron: "ja, buena suerte con eso".

Lo Que Antes Me Habría Quemado Por Dentro

Ahora bien, aquí viene lo interesante.

Antes, esto me habría quemado por dentro.

Habría soltado improperios. Me habría cabreado. Y por la noche habría estado dando vueltas en la cama maldiciendo al router inexistente.

Pero no pasó eso.

Porque hace tiempo que dejé de validarme con lo que pasa fuera. Ahora me valido con lo que yo hago.

Por Qué El Vídeo Ya Estaba "Cumplido"

Y el vídeo, se grabó.

Y eso, ya está en mi columna de "cumplido".

Hice lo que tenía que hacer. Lo que estaba bajo mi control. El resto (que no hubiera WiFi) no dependía de mí.

Y ahí está la clave.

Tú Al Estudiar Tienes Que Hacer Lo Mismo

¿Y sabes qué? Tú, al estudiar, tienes que hacer lo mismo.

No puedes permitir que tu autoestima dependa de si sacas un 9, un 5 o te cae la pregunta más puñetera del universo.

Porque muchas veces, eso ni siquiera depende de ti.

Todo Lo Que No Controlas El Día Del Examen

Puede que el profesor o tribunal tenga un mal día.

O que haya dormido en el sofá tras discutir con su pareja.

O que le moleste tu letra.

O que ni se lea bien tu examen porque tiene prisa porque el café le ha sentado mal.

¿Y qué vas a hacer? ¿Autoflagelarte? ¿Dudar de todo lo que estudiaste?

No.

Valídate Por Lo Que Haces, No Por El Resultado

Valídate por estar cumpliendo a diario.

Por estudiar incluso cuando no apetece.

Por repasar cuando podrías estar en Netflix.

Por planificarte cuando podrías estar a la deriva.

Porque si haces eso, ya vas ganando.

Y tarde o temprano, el resultado llega. Porque es inevitable.

La Diferencia Entre Validación Externa E Interna

Validación externa (frágil):

• "Valgo si saco un 9"

• "Soy bueno si apruebo"

• "Si suspendo es que no sirvo para esto"

• Tu autoestima sube y baja con cada nota

Validación interna (sólida):

• "Valgo porque cumplo lo que me propongo"

• "Soy disciplinado porque estudio aunque no apetezca"

• "Si suspendo, sé que di todo lo que pude"

• Tu autoestima es estable porque depende de ti

Por Qué Los Resultados Son Una Consecuencia, No Un Objetivo

Mira, los resultados son importantes. Claro que sí.

Pero no son lo único que importa.

Los resultados son una consecuencia de lo que haces cada día.

Y si te obsesionas solo con el resultado:

• Vives en ansiedad constante

• Cada test malo te hunde

• Necesitas validación externa para sentirte bien

• Tu motivación depende de factores externos

Pero si te enfocas en el proceso:

• Controlas lo que depende de ti

• Cada día cumplido es una victoria

• Tu autoestima es sólida

• Los resultados llegan como consecuencia natural

Cómo Empezar A Validarte Con Tus Acciones

1. Define qué está bajo tu control Por ejemplo: estudiar 3 bloques Pomodoro al día, repasar cada tema 3 veces, eliminar distracciones.

2. Cumple con eso cada día Independientemente de cómo te salgan los tests, de si entiendes rápido o lento.

3. Celebra el cumplimiento, no solo el resultado ¿Estudiaste lo que dijiste? Victoria. Aunque ese día no entendieras nada.

4. Separa el proceso del resultado "Hoy cumplí mi plan" es diferente de "hoy saqué buena nota". Céntrate en lo primero.

El Poder De Saber Que Lo Diste Todo

Hay una tranquilidad inmensa en saber que hiciste todo lo que estaba en tu mano.

Que te preparaste bien. Que fuiste disciplinado. Que usaste buenas técnicas. Que repasaste estratégicamente.

Porque entonces, el resultado ya no define quién eres.

Si apruebas: genial, era la consecuencia lógica.

Si suspendes: duele, pero sabes que no fue por falta de esfuerzo o preparación.

No Dejes Que Una Nota Decida Tu Valor

Una mala nota no significa que seas malo estudiando.

Puede significar mil cosas:

• Que ese tema necesita más repaso

• Que tu técnica de estudio necesita ajustes

• Que el examen tenía preguntas raras

• Que el tribunal estaba de mala leche

• Que tuviste un mal día

Pero no significa que no vales.

Tu Valor Lo Define Lo Que Haces Cada Día

Tu valor como estudiante u opositor no lo define:

• Una nota mala

• Un test que suspendes

• Un tema que no entiendes a la primera

• Un simulacro que sale mal

Tu valor lo define:

• Si te levantas cuando dijiste

• Si estudias aunque no apetezca

• Si repasas en lugar de solo avanzar

• Si cumples contigo mismo cada día

• Si sigues adelante después de fallar

Eso sí lo controlas. Y eso es lo que te define.

El Resultado Llega Cuando Lo Mereces

Cuando haces las cosas bien, día tras día, el resultado es inevitable.

Puede tardar más o menos. Puede costar más de lo esperado.

Pero llega.

Porque la constancia y el trabajo bien hecho siempre, siempre, terminan dando frutos.

Solo tienes que seguir validándote con lo que haces, no con lo que obtienes.

Porque lo que haces está en tus manos. Lo que obtienes, a veces no.